viernes, 9 de octubre de 2015

¡Soy yo, no mi mitad! (José Luis demediado)


Tres siluetas recientes: en abril, en agosto  y ayer mismo

Estos días me anda ocurriendo una cosa muy graciosa. Como ya estamos con el curso iniciado, me encuentro en mis primeras reuniones con amigos, compañeros y conocidos am los que desde  el inicio del verano y sus vacaciones correspondientes no nos habíamos visto. Así que cuando me acerco a ellos con la alegría de saludarlos –yo saludo por cortesía hasta al mismo demonio- noto que me miran con cierta extrañeza y algunos hasta el apretón de manos o el beso en la mejilla se hace leve, presuroso. Incluso, cundo por la mucha gente y el longo espacio saludo con la mano, me miran con cierto estupor y extrañeza – (¿quién es éste que me saluda?)-. Después caen en la cuenta:” ¡es José Luis, el amigo de siempre!”

Pues ¿qué ocurre? Pues que esa extrañeza, o sorpresa, o estupor que experimentan al encontrase conmigo con casi un aspecto nuevo y debido a mi drástica reducción de peso a la que una dieta rigurosa -pero no cruel-  y mi voluntarioso empeño han provocado. Así que les digo medio en broma: “soy yo, no mi mitad” Claro que me preguntan preocupados por si mi adelgazamiento es por alguna maligna enfermedad, y les digo que mis “gorduras” de antes eran propiamente la enfermedad (mis alarmas analíticas  de salud me lo avisaban ya con estrepitosas sirenas) y que ahora me encuentro perfectamente bien,  ágil y primaveral y, sobre todo, hasta desbloqueado mentalmente.


Así que con esta explicación que ahora doy creo que contesto a muchas preguntas posteriores que mis buenos amigos me pueden hacer. 

5 comentarios:

  1. Felicidades por el logro Jose Luis.
    No quiero fantidiarte la alegria, pero tengo que advertirte que ahora tendras que luchar contra un peligroso adversario llamado 'efecto rebote'. Esta etapa es casi peor que el regimen o sea que mucho animo.

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    1. Muchas gracias por congratularte conmigo. Sin el efecto rebote es un gran riesgo, pero espero que con la ayuda de Dios, de mi voluntad y la del médico lo pueda superar. Un abrazo

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  2. Pues a mi sólo me sale ¡felicitarte, felicitarte y felicitarte ! ... por tu esfuerzo, tu sacrificio y porque te queremos.
    Y nos encante verte asi de requetefeliz!! Bibi

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